A pesar de que día tras día utilizamos cremas hidratantes para mantener nuestra piel luciendo joven y radiante, en muchos casos no es suficiente para alcanzar los resultados deseados.

Por tal razón, siempre es importante darnos un poco de cariño adicional para vernos bellas. Uno de los trucos más comunes que puedes implementar son las mascarillas caseras. Entre los beneficios de estas se encuentran: su fácil confección, ayudan a regenerar la piel en corto tiempo y no contienen ningún químico abrasivo para tu piel.

Una de mis mascarillas favoritas es la de jengibre, miel y avena por las excelentes propiedades que contienen sus ingredientes.

Ingredientes:

• 1  ½ cda canela
• 1 cda jengibre en polvo
• 1  ½ cda miel
• ½  taza de avena
• ½ turmeric o cúrcuma
• 2 cucharadas de yogur griego

Beneficios:

• La raíz de jengibre tiene cualidades antisépticas para eliminar las impurezas de la piel.
• La canela le añade un aroma delicioso, además de ser un suavizador natural.
• La avena elimina la resequedad, dejando la piel hidratada.
• La miel contiene alto contenido de probioóicos.
• El turmeric elimina las células muertas.
• El yogur ayuda a disminuir el estrés de la piel.

Procedimiento:

Tritura la avena en un procesador de comida. Luego en un envase pequeño combina todos los ingredientes hasta que la mezcla se ponga pastosa. Déjala reposar en la nevera unos 10 minutos. Aplica una capa de la mascarilla en la cara lavada (evita aplicar en los ojos). Déjalo puesto por 20 minutos, luego enjuaga la cara con agua tibia. Y Voila!

Pendientes que próximamente compartiré contigo una mascarilla perfecta para el verano hecha de aloe + agave.

¡Hasta la próxima!

Rocío Lugo Quijano