Cómo comer sin engordar de más en la cena navideña
Cómo comer sin engordar de más en la cena navideña
El plato navideño es de las cosas más deliciosas que la cocina puertorriqueña tiene por ofrecer. Si nos dejan, comeríamos un buen plato de arroz con gandules, pernil, pasteles, ensalada de coditos y flan todos los días del mes. Ahem, el problema es que sí nos dejan. Si no te quieres ir en exceso estas navidades o deseas mantener tu figura, hay varios métodos que puedes implementar para disfrutar de la comida criolla y darte tus gustitos. Por supuesto, todo está en el balance.
Para lograr aunque sea mantenernos en forma (let’s be real, rebajar no vas a hacer) buscamos consejos con la nutricionista Gabriela Tirado. Luego de nuestra conversación, se convirtió en la hada madrina oficial de nuestros hábitos alimenticios.
¿Cómo se deben ver nuestros platos?
Para que tengas una idea de qué es lo que te estás metiendo a tu cuerpo, Gabriela Tirado nos explicó en qué consiste cada alimento del plato navideño, y nos mostró la cruda realidad de cómo se ven esos platos en la realidad. Hint: it’s not pretty.
Por lo regular, cada una de nuestras comidas cuenta con una composición básica de: proteína, farináceos, y vegetales. Y las porciones deben ser divididas por una mitad y dos cuartos. Ya te adelantamos que la mitad más grande no es la que va a estar llena de pernil…
1. Proteína
El lechón, casi un símbolo nacional, intocable e imposible de sustituir en la cena de Navidad. No obstante, no es la carne más lean . Además, la acompañamos con el cuerito, que es grasa saturada, la mala, la big no-no.
Esto va a ser fuerte de escuchar, pero… no puedes comer cuerito. No si quieres mantener tu peso. Y mientras te comas la carne que está más de adentro, mejor porque tiene menos grasa.
2. Farináceos
Nos aportan carbohidratos que nuestro cuerpo fácilmente convierte en energía, pero en exceso, los acumulamos en forma de grasa en nuestras panzas. Algunos farináceos en nuestra cocina son: el arroz con gandules, la ensalada de papa, la ensalada de coditos, los guineitos en escabeche, y por ahí sigue la cosa… Encima de eso, tendemos a añadirles más grasa con la mayonesa, el jamón de cocinar, las patitas, el bacon… Ya empezamos mal.
En tu plato debe haber ¼ de farináceo así que incluye porciones chiquititas de cada cosa y termina con un guineíto y dos trozos de ensalada de papa o escoge tu favorito. Ey, nadie dijo que esto iba a ser fácil.
3. Vegetales
El peor error que cometemos con nuestra dieta navideña es no incluir suficientes vegetales. El beneficio de los vegetales es inmenso, nos dan buenos nutrientes y nos sacian. En serio, sácate de la mente que te va a dar hambre en media hora.
Si quieres comer saludable estas Navidades, te tenemos que decir que la mitad de tu plato debe estar compuesta de leafy greens y/o vegetales. Asegura que tu ensalada sea rica: dale color con varios vegetales como pimientos o repollo. Haz los vegetales horneados para más sabor. Añade coles de Bruselas para más fibras. Y top it off con un poquito de aceite de oliva. Se puede, se puede.
Cuando va más allá de las porciones
Perder peso y mantenerse saludable es fácil de la boca para afuera. Además de la dieta alta en calorías a la que estamos acostumbrados, nuestros hábitos alimenticios muchas veces son controlados por nuestras emociones. ¿Qué hacer cuando el hambre es mental?
- Identifica si verdaderamente tienes hambre. Antes de coger un bocado de algo, pausa y reflexiona.
- Si identificaste que no es hambre, y es más una inquietud, busca otra actividad que te distraiga del problema.
- Si estás nerviosa, aléjate de la mesa de entremeses. Entabla conversaciones de tu agrado y evita esconderte detrás de los entremeses.
- Si el problema es muy grande y parece que se te está yendo de las manos, busca ayuda profesional.
Gabriela Tirado es una nutricionista certificada que trabaja a domicilio. La puedes conseguir en su página oficial en Facebook Nutrición en tus manos o llamarla al 787-486-6495.